viernes, 31 de julio de 2015

Destello



¿Recuerdas el color
del país
al que no se retorna?

El ojo curioso de la infancia
sondeando tramo a tramo
la miel del misterio;
las palabras del padre como una sinfonía
de certeras campanas;
la doliente ternura de la madre
con un sueño en sus brazos...

Pronto mudó la tarde el temblor en derrota.
Llegaron las hormigas en troncos de silencio
a mordisquear tu alfabeto de sombras,
y los glóbulos blancos de la decepción
fueron a morir
grito adentro.
El cielo gangrenado
trituraba silencios de vidrio
mientras la araña de la noche tejía
un traje de alcanfor para tu esperanza
macilenta

¿Cómo no viste al relámpago
luchando
por abrir una brecha en tu lengua?

El magma se diluye y una luz lo atraviesa
de cuajo.
Hoy mana un aire manso de tu mano a la tierra.

Espejea la palabra, resbala
sobre su propio abismo.

Bucea en tinieblas de quietud.

Reverdece en su búsqueda.








domingo, 19 de julio de 2015

BLUE'S



Garganta cordal
del cielo

Llamarada del desierto
latiente
en mi voz en penumbra:

picotee la madera del llanto
tu blues
de anochecido silencio

Libere del exilio la raíz
luminar
de mis manos.

martes, 14 de julio de 2015

El opio de la Parcas

Cabalgas, silencio,
a lomos de una bestia solitaria,
coronas mi temblor, señalas
mi cicatriz de pájaro vencido.
No,
no afines en mi oído
tu violín de suicidios,
tu incontable álgebra de aludes.
Tus dedos no pueden abarcar
mi cuello de amapola;
ya mi voz es murmullo quedo entre ríos de lumbre:
secó el trigo negro de la infancia en mis huesos
pero todavía no es tiempo de siega,
sino del blanco sideral, del gris asceta, del músculo cantor.
Deja que amarillee lentamente la sien
del otoño, que ablande su cordura
con saliva de esperas.
Reposará mi sangre en el opio de las Parcas
mientras castigue el sol de agosto los tejados
de un diciembre proscrito, 
intuido en la piel de la ceniza.